jueves, 16 de abril de 2009

Mi musa

Aun cuando la número 2 me haya dicho "no sé cómo te inspire, pero si te sirve qué bueno... nos vemos..", siendo que desde siempre te había dicho que me inspiras, sigues siendo una especie de musa para mí. He escrito estos pensamientos tan seguido que me estoy acostumbrando a escribir, lo cual es bueno.

A pesar de esto, nunca te he escrito nada a ti (sólo una carta y fue muy rápida). Es por esto, que te voy a escribir un poema... Quizá te escriba también una carta después. No estoy seguro, pero lo intentaré.


Despertar

Despertar,
Aún con los ojos cerrados,
la boca seca de tanto besar,
ensueño donde juntos amamos,
donde la vida parecía comenzar.

Aceptar la realidad,
esta realidad de tus ojos,
donde me ven diferente, ajeno;
Eran míos, llenaron mis antojos,
ahora son pasado, son veneno.

Carne, deseo,
los tenía y hoy los conservo,
Pero no tu risa, esa maravilla
hoy sólo es parte de tu cuerpo,
ayer se confundía con la mía.

Cómo olvidar,
cómo calmar tanto llanto,
cómo arrancarme tus caricias,
tantos sueños y planes vanos,
tantos besos, tantas delicias.

Despertar,
¿despertar para olvidar?
¿acaso es ese mi destino?
¿Por qué no puedo continuar
soñando con tus caprichos?

¿Despertar?
¡Despertar para olvidar!
barco que olvida su camino,
pedir a la gaviota o al mar
que olvide la playa, el mito.

¡Despertar!
Y decirle a mi almohada
que ya no llore más por ti,
o, ¿Acaso son mis lágrimas?
¿Amor que llora su propio fin?


No es especialmente bueno este poema. No soy muy bueno para la métrica. De hecho, ¡ni me fijo! Pero pues, es el poema que te escribo ahora. De corazón, para mi musa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario